La gratitud es un estado del ser y no solo una palabra

Todos sabemos lo que es estar enamorados, y no solo de una persona, sino también de algo, o de alguna circunstancia muy esperada que está a punto de concretarse y que nos otorga un estado de gozo.

Vislumbramos ese evento futuro y surge en nosotros una gran ilusión.

El corazón nos explota de ilusión al pensar en ese futuro potencial maravilloso.

Todos hemos conocido ese estado, cuya manifestación más clara es cuando conoces a una persona y te enamoras de ella a primera vista.

Podrían decirte: “¿Pero cómo pudiste enamorarte de alguien al que no conoces?”.

En realidad te has enamorado de la ilusión que te provoca el futuro potencial que estás dibujando en tu mente con esa persona.

En todo caso, es un estado de gozo, y resulta muy favorable utilizarlo para manifestar nuestros deseos.

Desgraciadamente, no es usual encontrarlo dentro de la vida humana actual.

La vida humana en la tercera dimensión está teñida por circunstancias que la gran mayoría de las personas percibe como muy desfavorables.

Todavía sienten dolor, pesar, aflicción, tristeza y resentimiento. Por esto, el estado de enamoramiento es tan difícil de sostener.

¿Estado de gratitud o estado de enamoramiento?

La gratitud te eleva a la energía del amor

 

Has alcanzado ese estado de gozo, pero poco después vienen los acontecimientos adversos a tu vida, y la ilusión se va por los suelos.

Pierdes el gustito que habías tenido. Ahora bien, los estudiantes que tienen herramientas pueden elevar sus frecuencias vibracionales. No tienen problema.

Pero, ¿y los que todavía no tienen las herramientas cuánticas?

Bueno, pues les compartiré a todos ellos, y también a los que ya las tienen, una herramienta que pueden utilizar a su favor.

Una energía que ya conocen y que no está tan bien usada como debería: La gratitud.

El estado de gracia que uno logra conseguir al llenarse de esa energía no tiene que ver con la repetición de la palabra “gracias”, sino en convertirte enteramente en ese gozo sincero en el cual encuentras motivos de agradecimiento en circunstancias, personas, lugares y objetos.

Es un gozo que te nace del pecho y no solamente una palabra.

El estado de gratitud y el estado de enamoramiento son extremadamente potentes.

La diferencia es que el gozo provocado por el estado de enamoramiento tiene su fuente en la ilusión ante un evento futuro, mientras que el provocado por un estado de gracia lo abarca todo a cada instante del aquí y ahora.

Entonces, si puedo sentir ese estado de gratitud, no dependo gran cosa de los eventos futuros.

En cambio, en un estado de enamoramiento, si no te sientes correspondido puedes pasar fácilmente de la ilusión a la tristeza y la decepción.

Al no cumplirse las expectativas que tenías ante ese evento futuro, tu estado se altera completamente.

El estado enamoramiento puede ser muy efímero

Al durar tan poco, no te sostiene en altas frecuencias, y por ello no resulta útil como soporte para tus procesos creativos.

Por su parte, el estado de gracia puede ser traído a este aquí y ahora para utilizarlo a nuestro favor bajo los postulados de la Ley de Atracción.

Muchas veces, cuando quieres crear algo en tu vida, buscas ese estado de enamoramiento.

Esta vez hablaremos de la gratitud, que es un estado del ser.

Vamos a buscar ese estado que en ocasiones es mucho más potente, porque la gratitud es un estado del ser actual, constante y presente en este aquí y ahora.

Debes saber que este estado del ser es mucho más fácil de lograr que el estado de enamoramiento. Resulta mucho más fácil conectar con ese estado de gracia.

En este momento actual, es probable que muchas energías de tercera dimensión provoquen en ti queja, enfado y resentimiento.

En esas condiciones, buscar un estado de enamoramiento es un poco difícil, a no ser que pase por ahí un chico o una chica ahí y te lleve al paraíso.

Desafortunadamente, esos amores a primera vista no son muy usuales en la vida del ser humano.

Así que no esperaría a que eso curra para despejar los tintes de oscuridad habituales.

Resulta más conveniente buscar el estado de gracia, al cual te conectas mucho más rápido y hace que puedas salir más fácilmente de toda la tercera dimensión que tienes creada en este aquí y ahora.

Lo que tienes que hacer es empezar a buscar actitudes de seres que han estado en tu vida hacia las que has sentido gratitud, o recrear circunstancias pasadas que te provoquen gratitud.

No importa que no las puedas volver a vivir nunca más. Lo importante es traer el estado de gozo a tu alma.

Entonces, el estado o sentimiento de gratitud que generamos cuando buscamos una emoción propiciadora es más potente que el del enamoramiento, porque lo que tomas como amor en realidad es miedo.

La obsesión no es amor

Cuando sientes esa pasión que siempre se transforma en obsesión, la llamas amor.

Eso no es amor.

El estado de amor es algo muchísimo más grande: Es un estado de total desprendimiento, de total desapego y de total unión con la Fuente.

Muy pocos seres en este planeta Tierra lo han logrado sentir.

Por lo tanto, es muy fácil que conectes con el miedo que con el amor.

Y al querer crear algo con ese sentimiento, vas a atraer algo muy diferente al amor.

Va a ser apego, obsesión o dolor.

El amor jamás produce dolor

Así pues, busca la frecuencia de la gratitud, porque esa sí la conoces y empezarás a reconocerla.

Y cuanto más la conozcas y reconozcas, será más potente en tus procesos creativos.

Digamos que te estoy enseñando un atajo bonito e importante que puedes utilizar en todos tus procesos creativos.

En realidad, todos debemos vivir en un estado de gracia; en un gozo constante aquí y ahora. Cuando te unes a la gran Totalidad, ya no necesitas cosas para sentir gratitud.

Solamente con salir y percibir un aroma entras a un estado de gozo. Un perfume, una brisa marina, una flor…

No necesitas de grandes cosas para sentir el estado de gozo, y una vez que lo conoces, es muy fácil regresar a él.

Sin embargo, para entrar en ese estado debes limpiar todas las emociones negativas que permanecen en tu vida.

No se puede percibir un aroma cuando estás resentido.

No se valora la brisa marina cuando estás ansioso. No se reconoce una mano amiga cuando estás llorando.

Por lo general, después de ocurrido un suceso así decimos: “Gracias por estar en ese momento a mi lado”. En ese momento no puedes sentir gozo.

El estado de gracia no es solo expresar una palabra, sino conectar con esta emoción

Entonces el estado de gracia no es solo una palabra.

Es esa emoción que sale por tu pecho cada vez que valoras a personas, actos, circunstancias o cosas.

A este respecto, algo muy sencillo que todos tenemos a nuestro alrededor y que la mayoría de las personas no ve es conectar con los elementos naturales.

No apreciamos el placer generado por todos los sentidos de nuestro cuerpo físico cuando entramos en contacto con los elementos.

Y eso lo tienes al alcance de tu mano. No tienes que buscar muchas memorias que te lleven hasta el gozo.

No obstante, si estás tan triste que no puedes conectar con los elementos, entonces búscalas.

Puede pasarte eso, porque la tristeza es una energía muy densa, y ni hablar del odio.

En ese caso, busca en tu memoria circunstancias que puedas recordar y hacer que traigas de vuelta esa emoción.

Al evocarla y empezar a sentir gratitud por esa memoria, elevas tu frecuencia vibracional.

Y puedes sentir la emoción que está atrás de la palabra “gracias” cada vez que recreas esa vivencia. Ahora sabes que no solo buscamos memorias para borrarlas.

También vamos a buscar memorias hermosas para traer de vuelta ese momento. Ve allí y evoca esa emoción. Después sal a la calle, al parque o al campo, y vas a sentir gratitud.

Pide a tu Presencia Yo Soy que te muestre lo que debes agradecer

Al hacerlo, no te sorprendas si de pronto empiezas a recordar eventos maravillosos de tu vida, mismos que puedes evocar para sentir gratitud.

También se puede usar el pasado para ayudarnos en este presente.

Ahora te compartiré tres decretos para que puedas invocar a tu Presencia Yo Soy y pedirle que te muestre esos eventos.

El primero es: Mi Presencia Yo Soy me muestra la gratitud en mi vida. Mira que sencillo; como todos los decretos efectivos, está hecho en tiempo presente.

El segundo es: Mi Presencia Yo Soy me enseña el estado de gratitud. Con esto le pides te muestre cuál es el gozo que debes sentir.

El tercer decreto es: Yo veo, siento y sostengo el estado de gracia con todas las personas, sitios, cosas y circunstancias que me rodean.

Al expresarlo varias veces podrás ver la gracia hasta en la más mínima cosa, y por supuesto, también en las grandes. Tienes muchas personas, sitios y circunstancias para agradecer.

Con ello saldrás de ese lugar oscuro en que te has metido arrastrado por tu tristeza, ira y culpa.

Por esos sentimientos de estar atrapado, de insatisfacción y de aislamiento y abandono.

Por la desesperanza, los celos y el deseo de venganza.

Esas emociones negativas te impiden entrar en estado de gratitud, y mucho menos en enamoramiento.

Asimismo, hay un ser cósmico enorme, hermoso, que está apoyándonos todo el tiempo, que es el Elohim de la Gracia. Puedes invocarlo también cuando lo necesites.

Tiene una llama plateada iridiscente, y puedes pedirle que te bañe con ella. Desde el mismo instante en que lo invocas, el Elohim de la Gracia vendrá a apoyarte.

Sal de la queja

La queja es una emoción de la cual debes salir cuanto antes.

Es algo muy humano y en lo que es muy fácil caer, sobre todo en el encuentro y el diálogo con otras personas.

Cuando te encuentras con alguien, buscas puntos en común para poder hablar, y el principal punto en común es la queja.

Me quejo de mi salud y entonces te empiezo a contar todo lo que me dijo el médico.

Me quejo de mi vida actual y entonces te cuento que debo irme de mi casa. Me quejo de todos los familiares que están a mi alrededor.

Observa tu entorno y escucha lo que expresa la gran mayoría de la gente.

Cada vez que te reúnas con alguien y sientas la necesidad de quejarte, o empieces a escuchar las quejas de otro, recuerda todos estos decretos que te he dado, porque la queja te encadena al dolor y te sostiene en dimensiones bajas, propias de la tercera densidad.

Vas a tener que salir de una conducta y un patrón humano muy común.

Así pues, deja de quejarte y busca que la Presencia Yo Soy te muestre todo lo que puedes agradecer. Recuerdo cuando, hace ya muchos años, empecé a dominar mi mente.

Me escribía en el brazo decretos y cosas para sostenerme.

Puedes hacerlo también, y así, cuando hables con tu vecina y empiece a quejarse, acude al decreto.

Lee: Yo veo, siento y sostengo el estado de gracia con todas las personas, sitios, cosas y circunstancias que me rodean, y vas a ver que le puedes cambiar la conversación.

La conduces a los lugares donde está la gratitud. Es fácil desarrollar esta habilidad, y con ella sales de situaciones que a todos perjudican.

Sostente en la visión de la gratitud

Cuando hayas encontrado el estado de gratitud, o los motivos por los cuales puedes estar agradecido, lo que debes hacer a continuación es sostenerte en esa visión.

Sostén tus pensamientos en ese lugar, por más que pertenezca al pasado.

Esos recuerdos hacen que observes futuros potenciales favorables.

Esto quiere decir que una memoria pasada de gratitud, en la cual hayas sentido felicidad, va a permitir que cuando la traigas de vuelta y la sostengas en una única visión, vuelves a crear un evento de iguales circunstancias.

Y no es que repitas el pasado, sino que puedas salir del dolor actual.

Al salir del dolor actual puedes salir de las frecuencias bajas que estás teniendo.

En cambio, la gratitud es una frecuencia altísima, y de una extraordinaria potencia creadora en esto de utilizar el poder eléctrico y magnético para atraer lo que deseas dentro del campo cuántico.

Entonces, utiliza esta emoción.

Cada vez que sientas esa emoción y tu Presencia Yo Soy te haya mostrado motivos para agradecer, sostente. Así elevarás tu frecuencia vibracional y traerás un cambio a tu vida.

Podrás salir del pozo donde caíste. Cuanto más profundo sea tu pozo, más debes sostenerte. No puedes crear eventos maravillosos si te sostienes en bajas frecuencias.

Cada vez te será más fácil utilizar el estado de gracia para crear

Una vez que hayas logrado vislumbrar lo fácil que te resulta entrar en este estado de gracia, utilizarás este conocimiento para crear cosas más grandes.

En ese momento ya tendrás claro cuáles son los verdaderos deseos de tu alma.

Has pedido a tu Presencia Yo Soy que te muestre eventos del pasado para recordarlos, y ahora es fácil traerlos.

Y de pronto utilizas ese estado de gracia para crear eventos futuros.

Ya una vez que aprendes la manera de hacerlo, lo usas una y otra vez.

Puedes evocar ese potentísimo estado de gozo con facilidad y así crear cosas nuevas. No es poca cosa. El corazón palpita y se expande.

Si te es muy difícil sentir gratitud, no te preocupes

Todos hemos pasado por eso.

Es una manifestación de la tercera dimensión. No te sientas culpable.

Eres un grandioso ser de luz que ha venido a este juego de la ilusión de la inconsciencia porque sabía que podía salir adelante.

Si te sientes bloqueado, invoca ayuda y busca en tu banco de memoria con toda tu fuerza.

Busca experiencias que hayas vivido y que te provoquen una enorme gratitud y gozo, así como personas que hayan estado en tu vida y que te hayan dado una mano.

Quizás hasta el día de hoy no has sentido la auténtica gratitud. Has agradecido, sí, pero no has sentido el gozo de la verdadera gratitud.

Busca esas circunstancias para encontrar la frecuencia altísima de la gratitud y poder usarla.

Vuelve atrás sin vergüenza. Incluso podrías hasta contactar a esas personas del pasado para de verdad agradecerles ahora, lleno del estado de gracia y no solo a través de la palabra.

Busca esa experiencia de tu vida pasada para poder conectar con esa emoción.

No te asombres que en ese momento aparezca una mano amiga para ayudarte y apoyarte en tu proceso de salida de la oscuridad.

Estás entrando en un campo de infinitas posibilidades.

Si adoptas un estado de gratitud, te conviertes en un imán que te hará posible volver a crear las circunstancias favorables que necesitas.

Si sumas a ese proceso la elevación de tu frecuencia vibracional, su efecto será prácticamente instantáneo.

Hoy mismo puedes encontrar la puerta de salida de este lugar oscuro donde estás.

Eres el único culpable de la situación que vives (y el único que te puede salvar)

Para entrar en estado de gracia, debes salir de ti mismo.

Sal de la culpabilización, porque eres el creador de todas tus circunstancias.

Así como puedes evocar un evento pasado para recrearlo, las circunstancias que vives hoy son producto de sostenerte en emociones como la queja, el resentimiento y el dolor.

Somos los únicos responsables de todo lo que creamos y los únicos capaces de generar una salida de nuestras situaciones adversas.

Puedes evocar situaciones de gratitud en las que fuiste apoyado para crear con ellas nuevas situaciones de apoyo, y así dejas dentro del campo cuántico esa gratitud por el apoyo recibido.

Esa gratitud vuelve a nosotros y nos permite entrar de nuevo en el estado de gracia.

Eres un Dios vivo

Y ese Dios vivo es extraordinariamente potente.

Por lo tanto, cada vez que te enfadas, te quejas y no demuestras gratitud, expresas la potencia de un Dios en tu propio perjuicio. Entonces, evita crear esos momentos.

Cambiar la mirada a la gratitud es de dioses.


Si te gustó este artículo y quieres profundizar más en este tema, te recomiendo que leas el artículo anterior: No vale la pena conservar lo que no disfrutas

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