La mentira es el veneno más destructivo
Es necesario aprender a vivir dentro de una nueva realidad. Puedes convertirte en el nuevo humano de esta Era de Acuario. Muchas de las cosas que hasta hace muy poco estaban bien vistas, hoy están mal, y a su vez, todo lo que estaba mal visto en la Era de Piscis está bien visto ahora.
Debes saber que el juego de la ilusión de la inconsciencia ha terminado. Ahora todos los participantes en él pueden despertar y abandonar sus laberintos. Sin embargo, para salir de él debes adquirir un nuevo conocimiento. Todos sabemos que hay una salida, pero debes escuchar a quien te indica dónde está.
La mentira enmascara tu verdadero Ser
Muchas veces a lo largo de tu vida has tenido que crear una especie de fantasía o tapadera que justifique tus actos. A veces es algo hasta inocente, como por ejemplo, inventar una mentirilla cuando llegas tarde al trabajo. Sin embargo, puede tratarse de algo trascendente, como unos padres que no le dicen a su hijo que es adoptivo.
Este último puede ser un acto de amor y protección, pero también es una mentira muy grande. A este respecto, algunas personas llegan incluso a adoptar una doble vida, sin tomar en cuenta que a partir de esa falsedad se generan muchísimas más. De esta manera, intentar justificar el llevar una doble vida es un trabajo muy arduo.
Ciertamente, en lo referente a la conducta humana no existe una verdad única. Cada individuo posee la suya, y lo que para unos es verdadero, para otros es una falacia absoluta. Cada persona debería manifestar su verdad en lo que piensa, dice y hace, pero cada vez que quieres tapar algo, enmascaras un sentimiento.
Puede ser que vivas una gran mentira toda tu vida, o que tu vida esté compuesta de infinidad de pequeñas falsedades, pero en ambos casos estás escondiendo tu verdad. En ocasiones lo haces por vergüenza; por no sentirte valiosa o valioso, o porque crees que no has cumplido las expectativas de otros.
La justificación de la mentira
Hay cientos de cosas que te pueden llevar a cubrirte de mentiras grandes o pequeñas. Al final, un mitómano empieza con una mentirilla, hasta encontrarse tan enredado que ya no puede salir. He visto seres que a partir del intento por cubrir una leve situación vergonzosa se ven envueltos en la mentira de por vida.
Toda mentira es altamente destructiva, porque oculta y deforma tu verdad. Te convierte en un ser tan enmascarado que resulta difícil para los demás percibir tu verdadera esencia. Esto provoca que no puedas establecer una comunicación genuina con las personas que te rodean.
Este proceso opera incluso en tus relaciones más íntimas, ya que si te enmascaras en la mentira, serás impermeable a la comunicación más profunda y real. Entonces, fallarás cada vez que quieras lograr una interacción exitosa con respecto a otros, ya sea a nivel comercial, familiar, sentimental o en cualquier otro ámbito.
No te sientas víctima; no digas mentiras piadosas ni justifiques tus errores mediante pequeñas falsedades, ya que eso te aleja de los otros.
Decir y actuar conforme a tu verdad te acerca al amor
No mientas para evitar que otros se ofendan. Si te acostumbras a decir este tipo de argumentos falsos, llegará un momento que no puedas detenerte. Una nueva mentira justifica a la anterior, y así hasta el infinito. Por esto el estar cerca de algunas personas mitómanas me enseñó a ser verdad absoluta y total.
A través de ellos pude ver que una gran mentira siempre empieza con una mentirilla. Viéndome en su espejo, aprendí que cuando decía algo, debía hacerlo desde el corazón. Nunca justifico mis actos o mis motivos con una mentira. Aprendí a hablar con pocas palabras verdaderas.
Aprende a cortar de tajo toda la red de mentiras en la que te has anudado, empezando por las mentirillas aparentemente inocuas. Procura que cada palabra que salga de tu boca o escribas sea lo más auténtica posible. Que sea auténtico el abrazo que das y las acciones que emprendes.
Haz que tus sentimientos afloren desde el corazón. No olvides que la observación de la verdad de los otros puede ser muy distinta a la tuya, y que sostener tu propia verdad hace creíbles todos los actos de tu vida, y al ser creíble, eres respetado o respetada. La gente confía en ti plenamente porque siente la verdad que sale de tu corazón.
Expresar tu verdad te hace creíble y confiable
Cuando te conviertes en verdad absoluta, todos pueden percibirlo. Cierras acuerdos, estableces contratos, y las personas creen cien por ciento en tu palabra. El nuevo humano en esta Era de Acuario debe ser verdad absoluta. Debe vivir su verdad de forma absoluta.
Hacer y decir tu verdad absoluta, esa que sale de tu ser más íntimo, hace que te conviertas en una persona creíble y confiable. Esto representa una extraordinaria sanación para tu vida. Lo que más lastima al otro no es la defensa de tu verdad, sino el sentir que les has mentido.
Lo que daña al otro es la mentira que enmascara tu verdad. ¿Y sabes por qué? Porque al defender tu verdad, lo que sale de tu ser es amor. En cambio, cuando la mentira sale de tu ser, esa oscuridad es percibida por el otro, independientemente de que haga un esfuerzo por creerte.
Toda mentira destruye
Por muy elocuente que seas, lo que siempre perciben los demás es la frecuencia del miedo que irradia tu mentira. Esa máscara que te pones para aparentar algo que no es real es lo más dañino que existe en las relaciones. Por eso afirmo que la mentira es el veneno más letal. Detrás de la mentira siempre está el miedo.
Allí se esconde el miedo a que te vean como realmente eres. Puedes llegar a manipular todas tus circunstancias por miedo a la pérdida. Esto provoca que todo lo que das al otro lo destruye y te destruye. Te convierte en un ser impermeable al amor de los otros. La mentira forja una enorme coraza que impide ver quién eres de verdad.
Acostúmbrate a decir siempre lo que sientes. En realidad, no existen las mentiras piadosas, y la verdad más absoluta es la que menos duele. Por lo tanto, sé sincero y asume todas las consecuencias de la expresión de tu verdad. Dichas consecuencias siempre serán menos nocivas y dolorosas que una mentira.
No dejes que las sombras retrasen tu camino hacia la iluminación
Toda verdad libera, y todo miedo ata
La verdad te libera por completo del deseo de control, así como de la culpa y la necesidad de justificar tus acciones a fin de ser bien recibido por los otros. Eres un ser libre cuando no tienes que justificar tu vida. Las personas atrapadas en la red de grandes mentiras no reciben el respeto y el amor de los otros.
Se han construido una coraza tan grande que no pueden dejar fluir el amor en el cual han dejado de convertirse. Por eso, cuando no te animas a decir la verdad, ten la absoluta certeza de que sostienes miedos en los que debes trabajar y resolver. Recuerda que detrás de la mentira nunca se encuentra el amor.
Esos miedos que debes traspasar destruyen tu cuerpo físico. No hay energía más destructiva que el ocultarse detrás de una mentira. Tal conducta genera un gran resentimiento y una gran falta de amor. Así pues, evita por completo intentar alcanzar tus metas o el amor de otra persona por medio de la mentira.
Antes de mentir, examina tus miedos
Quién esté libre de mentiras, que tire la primera piedra, pero mantente siempre alerta. Cada vez que estés a punto de expresar una, por más pequeña que sea, analiza cuál es el temor que se esconde detrás de ella. Pregúntate qué miedo oculto yace detrás de esa falsedad.
Aprende también a hablar con pocas palabras. No hace falta justificar tus actos con frases falsas pero perfectamente estructuradas. Y no importa quien te pida justificarte, así sea tu padre, madre, marido, esposa o quien sea. Eres un ser de libre albedrío, y no tienes necesidad de agregar palabras a tu sentir.
Cada vez que vayas a escribir o a decir algo, reflexiona un instante y pregúntate cuál es tu motivación y cuáles son tus miedos. Al hacerlo te darás cuenta que en tu relación con ciertas personas impera el temor y no el amor. Si piensas que te volverás loca o loco si te abandona, temes más que amas. El apego ha vencido al amor.
Pregúntate por qué los demás también te mienten. ¿A qué le temen? Observa cómo justifican sus acciones y percibe su miedo a que los vean tal cual son.
Los miedos hacen que intentes justificarte
El miedo a la pérdida, a que el otro ejerza su libre albedrío y no haga tu voluntad, a las represalias del otro y a no ser suficientemente bueno justifican la mentira. Enmascaran tu verdadero ser para que el otro no te lastime. Ese es el veneno que crea muchas enfermedades y relaciones tóxicas.
Ese veneno impide que el amor del otro traspase tu coraza e irradie tu ser. Cada vez que sientas la necesidad de decir una mentira, por más pequeña que sea, considera un punto importantísimo: La mentira es un gran observador en el campo de las infinitas posibilidades.
Por lo tanto, si para evitar ir a una reunión mientes diciendo que te duele la cabeza, no te sorprendas si acaba doliéndote. No Te sorprendas si todas las mentiras que has dicho acaban creando tu futuro. Por esto, si vas a tomar una decisión o a expresar una frase, considera que la mentira siempre te dañará.
Y luego plantéate otra pregunta: ¿vale la pena todo el daño que causaré para justificar mi conducta y tapar mis miedos? Ante cada acto, decisión, aventura o palabra en tu vida, sopesa bien todas sus posibles consecuencias de sostener falsedades. La principal es que te convertirá en un ser poco fiable, poco creíble, e insensible al amor.
Si mientes solo para justificar tus actos te alejas del amor en el que debes convertirte. Observarás la mentira en el campo cuántico. Esa mentira llegará a tí y creará tu futuro potencial.
Estar muy cerca de tu realización hace que se detonen miedos en ti
Solo el amor te rescata de la mentira
El rostro de una persona que miente constantemente se convierte en una máscara incapaz de convencer o conmover a los demás. Recuerda que el amor es la fuente y la única verdad. Lo que dices, haces y sientes desde el corazón es tu verdad, pero la única verdad absoluta en todo el Universo es el amor.
El amor es lo único que puede disolver todos tus miedos y situaciones de las que debes salir y sanar. Esas situaciones son precisamente todas aquellas en las que te crees obligada u obligado a mentir en tu condición de ser humano participante en este juego de la ilusión de la inconsciencia.
Generalmente se describe a Dios como amor. También se describe a Dios como omnipresente. ¿Y qué significa eso? Que no existe un solo lugar en todo el Universo que no sea amor. Lo único que puede alejarte del amor es el miedo. Por lo tanto, la mentira, que es la máscara del miedo, te aleja por completo del amor.
El amor está dentro de ti
La gran meta que tienes ante ti es tu propia ascensión, y esa ascensión consiste en convertirte en amor. Y el convertirte en amor es solamente un estado de reconexión. Al ser omnipresente, el amor habita en cada átomo de tu cuerpo físico y en todos tus pensamientos y emociones.
No busques el amor fuera de ti. Lo llevas dentro. Eres ese amor, y solo debes reconectarte con él. Te repito que esa debe ser tu única meta, ya que si te conviertes en amor, todos tus deseos se harán realidad y podrás salir de la tercera dimensión por siempre y para siempre.
Puedes esforzarte mucho para elevar tu consciencia y crecer espiritualmente, pero no te servirá de gran cosa si no adviertes que la mentira es un veneno destructor. Impide que el amor entre en ti. Te enmascara y te aleja por completo de él. En el momento que el otro recibe tu mentira confiando en ti, recibe todos tus miedos.
Ten en cuenta que al mentir abres otras realidades, y que al sostenerlas te encadenas a la tercera dimensión. Esas ataduras te impedirán salir del juego de la ilusión, y por lo tanto, del dolor.
Toma el camino de tu ascensión
Al mentir, en vez de emprender un camino ascendente caminas en sentido opuesto al de tu evolución. La mentira te destruye y destruye al otro. Destruye tu cuerpo físico e impide que te conviertas en ese Dios vivo que eres. Por esto debes evitar la tentación de justificar no solo tus actos, sino tu manera de ser.
No mientas para justificar tu verdad. No mientas a causa del miedo a la pérdida, o a que el otro te desprecie o te rechace. Traspasa esos miedos y considera atentamente si no hay en ti el deseo de manipular o controlar a los demás. Aleja de ti a la mentira y descubrirás al ser que de verdad eres.
Al expresar una mentira, por más pequeña que ésta sea, te alejas de tu ascensión, y por consiguiente, de tu liberación. Así pues, procura que cada palabra que digas, cada abrazo que des, cada mirada que regales y cada frase que escribas sea la más pura expresión de tu verdad.
Y si lo consigues, te puedo asegurar que tu maravilloso Ser nunca más necesitará aparentar algo que no es para amar y ser amado.
Si te gustó este artículo y quieres profundizar más en este tema, te recomiendo que leas el artículo anterior: El camino hacia tu espertar está abierto
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