Revierte el desprecio y serás invencible

Vamos a hablar de un tema importante y que ya he abordado en varias ocasiones: La importancia de no juzgar o criticar a las personas. En primer lugar, cada vez que hablas mal de alguien estás generando desprecio hacia ese ser, y al hacerlo expresas un sentimiento de falta de valoración hacia ti misma o ti mismo.

¿Cuánto te aprecias?

Cada vez que observas algo despreciable en el otro muestras tu verdad. Muestras el verdadero sentimiento que tienes hacia ti. Esa falta de valoración provoca que hagas cosas en tu vida que refuerzan ese desprecio. Le quitas valía a cosas, situaciones e individuos.

Medir el grado de apreciación que tienes por ti es algo que debería preocuparte. Cada vez que sientes la necesidad de criticar y despreciar al otro muestras falta de aprecio a tu propio ser. Cada vez que necesites quitarle valor a quienes interactúan contigo es cuando más claramente muestras tu visión de desprecio hacia ti mismo.

Si tu vida está llena de observaciones negativas hacia los demás, en las que siempre les quitas su valor, buscarás que otros apoyen tu visión despreciativa. Con esto, además de perjudicarte, involucras a otros para que se unan a tu desprecio. Ahí ya tienes una primera forma de medir tu grado de apreciación hacia ti.

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Quien más desprecia es quien menos se valora

Las personas más criticonas y juzgadoras son las que más se desprecian. Necesitan sacar todo ese sentimiento para poder sentirse valiosas. Lo que hace alguien que critica y juzga es restarle valor al otro para poder crecer. Con ello no solamente intenta destruir al otro, sino que muestra su verdad.

En este artículo te compartiré una clave muy eficaz para poder dar vuelta a muchas situaciones adversas. Este proceso de desvalorización se desarrolla incluso en los niños, quienes en ocasiones pueden llegar a ser muy crueles entre sí. Cuando alguno desprecia a otro porque se siente con menos valía surge el bullying.

Cuando te veas en una situación así, es necesario darle vuelta al sentimiento de desprecio. Cada vez que alguien quiera hacerte daño o menospreciarte, debes sentir cuánto te aprecia esa persona y cuánto valor ve en ti. Ese otro intenta inocularte su propia desvalorización para que tú no sobresalgas.

Dale vuelta a toda situación adversa

Si cada vez que alguien te desprecia cambias la visión y dices: «¡Cuánto valor tengo yo para esa persona y cuánto me aprecia!», pronto habrá una diferencia en el trato que recibes. Cuando tu hijo venga llorando del colegio, dile: «¿Sabes por qué te dicen eso? ¡Porque creen que tú vales más que ellos!».

Esto es una verdad absoluta; no es un juego de palabras para evitar que sufra. Cuando alguien te desprecia, lo que debes manifestar y sentir es cuánto te aprecia ese ser, cuánto valor ve en ti, y cuán poco valor ve en sí mismo. Por eso necesita sacar ese autodesprecio que muchas veces se reviste bajo las formas del acoso y la envidia.

Esto es importantísimo y debes grabarlo a fuego en tu mente para que luego se manifieste en tu corazón. Cada vez que te menosprecien, di: «¡Wow, cuánto valor tengo!». Al efectuar esta observación haces que la energía de destrucción hacia la que el otro quiere llevarte se convierta en una energía positiva.

Transforma esa zona oscura de desvalorización en una mirada abundante. Dile a tu hijo: «¡Tienes tanto valor que tus compañeros ocupan su energía en intentar destruirte!».

Al cambiar tu observación cambias la energía que te rodea

Lo que logras con esa mirada es transformar el disparo de energía negativa de quien te desprecia. Con esa misma energía ya transformada alimentas tu propia valía. Esto quiere decir que cada vez que alguien te desprecia, tú creces. Finalmente, a lo largo de este proceso puedes ver una gran verdad universal.

Esa verdad universal es que el otro necesita destruirte porque ante sus ojos tú vales más que él. Conocer esta verdad te ayudará mucho en situaciones como un festejo familiar, en el que por lo regular se dispara mucha energía de desprecio. Alguna incluso está enmascarada detrás de actos aparentemente benevolentes.

Cuando alguien hace algo por ti dando a entender que tú no puedes hacerlo bien, el mensaje es de desprecio. Eso ocurre mucho en las familias y en los trabajos. Ese otro no logra ver lo que vales y lo que tú puedes dar en cada situación o circunstancia, y eso se debe a que es precisamente quien desprecia el que se siente poco valioso.

Sostén una mirada de abundancia hacia ti

Tener una mirada abundante te hace crecer cada vez más. Puedes usar la energía destructiva del desprecio y transformarla en una rampa que te haga despegar hasta donde no creías llegar. Sólo necesitas cambiar tu mirada y ajustarla a la verdad universal. Sólo requieres eso.

Quien te desprecia quiere inculcarte una ilusión. Quiere hacerte ver algo que está proyectando y que se encuentra en su interior. Quiere que proyectes el reflejo de lo que es él. Sin embargo, la verdad universal es que te desprecia porque vales mucho y él se siente inferior a ti. Eso es lo que debes grabar en tu mente de aquí en adelante.

Y cuando logres grabarlo, el dolor ya no existirá en ti. Muchos de los sufrimientos de los seres humanos están basados en estos traumas de desmerecimiento, de falta de valoración y de ninguneo que llegan a aniquilar por completo la autoestima de quien los experimenta.

Esto también ocurre en las relaciones entre padres e hijos, sobre todo en los que permanecen atados a preceptos de la Era de Piscis. Los padres de la Era de Acuario saben apuntalar en sus hijos el valor que poseen por naturaleza. Lo estimulan para que puedan ser independientes. Les hacen crecer las alas para que puedan volar.

Los padres que saben lo que sus hijos valen no caen en la sobreprotección. Fomentan esa valía, y sacan provecho de las circunstancias desfavorables para crecer aún más.

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Transforma la destrucción en construcción

Ahora veremos cómo puedes no solamente utilizar la energía negativa como una rampa de despegue, sino también ver el amor en cada circunstancia y lograr que ese otro que se desprecia a sí mismo pueda ver su propio valor. No hay una sola persona que carezca de valor. El autodesprecio es solo una creencia.

Algunas personas proyectan esa creencia errónea sobre el otro y así generan el desprecio que le muestran. Esa proyección de lo que creen ser es en realidad mera ilusión, porque la verdad universal establece que cada uno de nosotros poseemos un valor incalculable. Somos únicos e irrepetibles.

Cada uno de nosotros constituye la individualización de Dios. Existen infinitas posibilidades de ser, y tú representas una de ellas. Nadie es igual a otro, y por lo tanto, el valor que cada persona posee es enorme, porque la posibilidad que encarna no se puede repetir.

Lo que podemos aportar cada uno de nosotros es único. Por esto puedes ver claramente que la ilusión de ese ser que genera en sí mismo falta de aprecio se basa en una falta de conocimiento de la verdad universal. Simplemente cambiando tu observación transformas el desprecio y anulas su efecto pernicioso.

Tu desvalorización desata una guerra energética

No olvides que cuando te desprecias, esa emoción negativa se vuelca hacia los demás. Esa falta de valorización se ve reflejada en tu trato hacia el otro, por lo que podrías intentar despreciarlo. Es una forma natural de defenderte ante la circunstancia que se te presenta y detona la creencia errónea sobre tu falta de valía.

Ten en cuenta que cuando utilizas esa energía de desprecio no puedes construir una rampa para hacer despegar tu autoestima. Cuando te dejas guiar por la ilusión, te ves reflejado en lo que intentan mostrarte y caes fácilmente en la desvalorización que el otro intenta fomentar en ti.

Y así, tu desprecio puede convertirse en la respuesta que el otro reciba. Criticas y juzgas, y entonces no utilizas esa energía negativa para crecer. Haces que el otro reciba lo mismo que está enviando. Cuanto más odio dejas entrar, más resentimiento provoca en ti esa desvalorización.

Y ya sabes que cada vez que realizas una observación que no sea igual al amor, eso mismo vendrá a ti multiplicado. Así pues, tu respuesta puede hacerte crecer o provocar una guerra energética. Ante esto tienes dos alternativas: Continuar en la ilusión del desprecio, con toda la destrucción que conlleva, o entrar en el camino del amor.

Esta nueva mirada es capaz de transformar tu vida

El camino del amor es elevar tu autoestima y así poder ver la verdad universal. Al reconocer cuánto vales, puedes ver que el otro necesita atacarte, despreciarte y desvalorizarte para intentar construirse. El camino del amor es ver en ese otro no lo que expresa, sino lo que de verdad siente.

Normalmente, cuando te critica o juzga, el otro cree tener poder sobre ti. Si tú entras en la ilusión, se lo concedes. En cambio, si entras en la verdad universal y te elevas por encima del desprecio y la desvalorización, aumentas tu autoestima y la utilizas como rampa para dispararte hacia arriba.

La verdad universal puede transformar tu vida para siempre. Seguramente te enfrentarás a muchas situaciones de desprecio, pero si eres capaz de ver el amor en todas ellas, te conectarás con el amor a ti mismo y hacia el prójimo, por más que el otro intente destruirte.

El amor a ti mismo transforma la energía de los otros

Cada vez que entras en la verdad universal logras que el aprecio hacia ti mismo aumente en todos los momentos de asedio que sufres. Le das vuelta por completo a la destrucción que te amenazaba al conectarte con la energía negativa y empezar a criticar, juzgar y fomentar odios.

Todo cambia con solo cambiar tu observación. Es la misma situación, pero en vez de sentirte desvalorizado te sientes apreciado. Estoy segura que has vivido una situación de desprecio muchas veces, porque es una constante de la vida humana, al igual que la envidia, los celos y la competencia.

Sin embargo, es una constante del ser humano de tercera dimensión. Cuando otros seres compiten contigo, su admiración puede transformarse en envidia. Asimismo, los celos son el plato cotidiano en la vida de muchas familias, y como bien sabes, la aparición del desprecio, la envidia y los celos es normal en los colegios.

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Haz que el amor crezca aún en medio de las tormentas

Al tener este cambio de visión, tu amor crece aún más en medio de las aparentes tormentas. Eso es muy hermoso, pero requiere de esfuerzo. Muchos de mis estudiantes caen del lugar donde habían logrado subir cuando aparecen esas situaciones de desprecio de las que ya hemos hablaso.

Puedes vivir una tormenta si dejas que ese ser que te desprecia logre hacerte entrar en las bajas vibraciones de la desvalorización, los celos y la envidia. En cambio, si en medio de esa aparente tormenta haces crecer tu amor, valorando la valía que posees, estás a salvo. Te has convertido en un ser invencible.

Si le enseñas esto a tus hijos desde muy pequeños, estarán a salvo de por vida, porque sabrán que aun en momentos difíciles el amor puede crecer y hacer que te conviertas en un imán irresistible para la abundancia. No olvidarán que el amor es la fuerza más grande de todo el Universo, y eso les permitirá seguir sus sueños.

Transforma las tormentas en amor. No le estás mintiendo a ese niño al decirle que su valía puede crecer hasta convertirse en un ser al que nada ni nadie puede destruir.

Lo que intenta destruirte te fortalecerá

Quien intenta interponerse en el camino de tus sueños tiene dos posibilidades: O lo destruye o se topa con un ser invencible que a cada ataque crece más. Dentro de este plano físico, en el momento en el que tienes un sueño se suscitan muchas energías a tu alrededor que pueden construirlo o destruirlo.

Puedes impedir su destrucción al cambiar tu observación de la energía del desprecio. Modifícala cada vez que escuches frases como: «No vas a poder», «no vales nada», «no sirves para esto», o «te va a ir mal». Quien desea destruirte sabe por donde puede lastimarte y hacerte dudar de tu valía.

Dale la vuelta a esa energía negativa y utilízala para entrar en la verdad universal expresando: «Yo Soy invencible. Si alguien me desprecia es porque valgo mucho y tiene miedo de que no me pueda igualar». Conectarte con el amor te hace invencible y evita que todas las aparentes tormentas destruyan tus sueños.

Convierte el desprecio en aprecio

Puedes ver el aprecio hacia ti en cada una de las situaciones en las que otro quiera despreciarte. Es grandioso utilizar una energía de destrucción para tu propia construcción. Con esta mirada tendrás a tu disposición, además de tu propia energía, la energía de los otros que vas a usar para la edificacióne tus sueños.

Al tener esta observación ya no hay nada ni nadie que te detenga o te pueda destruir. Si grabas a fuego esta enseñanza en ti, tu vida cambiará. Esto es muy importante, ya que muchas personas tienen parejas que los desprecian, hay muchos hijos que son despreciados por sus padres, y hay muchos jefes que desprecian a sus empleados.

Muchos compañeros de trabajo se desprecian entre sí, y muchos alumnos en los colegios desprecian a sus pares. Es una situación cotidiana, pero ahora sabes que puedes transformar esa energía de destrucción. Puedes usarla como rampa para construir tus sueños. Te haces invencible usando el poder del amor a ti mismo.

Un decreto muy poderoso

Puedes construir amor propio en ese ser que cree tener una valía inferior a la tuya y por eso te desprecia. Cuando lo haga, toma el disparo de energía negativa que te lanza y, transformándola en amor a ti mismo, mándala de vuelta al otro expresando este decreto: Yo Soy la única Presencia e inteligencia actuando en y dices su nombre.

Esto te permite empoderar al otro en el amor, porque lo conectas con su Presencia Yo Soy. Haces que pueda construir amor hacia sí mismo y que no desprecie a los demás. Así, no solo te empoderas y utilizas la energía para ti, sino que mediante el decreto que te compartí haces que ese otro también pueda verse valioso.

Esto es muy importante porque, como te dije antes, todos somos únicos. Todos valemos muchísimo y tenemos algo que aportar. Eres un eslabón de la gran cadena de seres que conforma este plano físico. Cada uno tiene una función específica, que no tiene nadie más, y somos irrepetibles.

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Empodérate mediante el aprecio

Tienes la facultad de empoderar no solamente a ti mismo, sino a todos los demás. Cada vez que el otro te desprecie de una forma u otra, criticando o juzgando por envidia, celos o competencia, expresa este decreto. En ese mismo instante lo conectas con su Presencia Yo Soy y logras que empiece a apreciarse a sí mismo.

Al venir a ti una energía de destrucción tienes dos caminos: Entrar en la ilusión y desvalorizarte, bajando tu frecuencia y destruyendo todos tus sueños, o entrar en la verdad universal utilizando como rampa esa energía de desprecio, afirmando: «¡Cuánto valor tengo para que el otro me quiera destruir!».

Con esto haces crecer el amor a ti mismo, y entonces esa aparente tormenta se transforma en una fuerza irresistible, donde tu sueño cobra aún más fuerza. Te vuelves poderoso; nada ni nadie logrará derrotarte. Cuanto más lo manifiestes en ti y más logres salir de la crítica y el juicio de los otros, más invencible serás.

Sigue el camino de la verdad universal

Ante el desprecio de alguien, expresa el decreto: Yo Soy la única Presencia e inteligencia actuando en ese ser. Conéctalo con su Presencia Yo Soy y con el amor para que empiece a amarse y valorarse. Un ser que se aprecia a sí mismo jamás destruye a otro.

Solamente ve en el otro el aprecio que ve en sí mismo, sabiendo que el amor es la fuerza más constructiva. Te repito que puedes, aún en medio de una aparente tormenta, darle vuelta a todas las situaciones y hacer que tus sueños se potencien con ese amor que has generado en ti a partir del desprecio.

Así que ahora ya no debes temer a las tormentas, porque te van a servir para hacer crecer tu amor y el amor hacia los otros expresando el decreto que te he compartido. Es maravilloso vivir así, y te lo digo por experiencia propia. Lo que te enseño es lo que manifiesto en mi vida. Es algo que yo uso y tengo más que probado.

El amor es la fuerza más grande del Universo

Dios es amor, amor es Dios, y Dios es una fuerza omnipotente, omnipresente y omnisciente. Es lo único que existe en todo el Universo. Cuando veas una aparente tormenta en la que crees que no hay amor, cambia tu observación y conecta con esa fuerza. Serás un ser invencible, que nada ni nadie podrá detener.

Esa frecuencia en la cual debes entrar, que es la del amor universal, hará que manifiestes el Dios vivo que eres. No olvides que esa es tu condición real, en tanto y en cuanto manifiestes la fuerza irresistible del amor, el poder más grande que existe en todo el Universo.

De esta manera, en este artículo te he compartido una verdad universal grandiosa; una verdad que hará de ti un ser invencible, capaz de aprovechar todas las tormentas que se presenten en su vida para crecer cada vez más en el amor en el que ya se ha convertido.

Y así, cada vez que alguien quiera destruirte te hará entrar más y más en el amor universal y en la valía de tu propio ser.

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Si te gustó este artículo y quieres profundizar más en este tema, te recomiendo que leas el artículo anterior:La Era de Acuario origina nuevas formas de vida

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