Si algo no te dura es que no lo cuidas

Vamos a cambiar el paradigma de lo que significa cuidar algo o a alguien. Muchas veces dices: «Tanto que lo cuidé y al final se perdió». A pesar de tu esfuerzo se acaban relaciones, trabajos o circunstancias que estimabas, y en ese momento te lamentas: «Tuve cuidado en hacer las cosas bien y sin embargo no sirvió de nada».

Eso ha ocurrido porque mantienes una visión tergiversada de lo que es cuidar. Estás acostumbrada o acostumbrado a sobreproteger, pero el cuidado y la sobreprotección no son sinónimos. Lo que no has tenido en cuenta hasta hoy es que detrás de todo cuidado desmedido están la culpa y el miedo.

Esas emociones negativas son el origen de muchos procesos de manipulación y control. Debes intentar salir de ellos cuanto antes, porque tales conductas ya no tienen lugar en esta Era de Acuario. Ten en cuenta que la culpa y el miedo son la forma más rápida de descuidar algo y perderlo para siempre.

Manifiesta el amor que reconoces en ti

Manifiéstalo en todas tus circunstancias y en los seres que contactas a diario. Fíjate que no hablo del amor que das o crees dar, sino del amor en que debes convertirte, y que recibes al conectarte con tu Presencia Yo Soy. Recuerda que solo puedes recibirlo después de calmar tu mente mediante la transformación de tu energía.

Ese es el amor que debes reconocer en ti y manifestar en todas las cosas, seres y circunstancias de tu vida. Recuerda también que el miedo está escondido detrás de lo que muchas personas entienden por amor. El verdadero amor es aquel al que nos conectamos y empezamos a irradiar.

Que no te motiven la culpa y el miedo

Elimina la culpa, el miedo, el control y la manipulación en todos los actos de tu vida. Erradica los «debería» y los «no me queda otra». Incluso debes eliminar lo «políticamente correcto», porque cada vez que realices un acto por compromiso y que no esté de acuerdo con tu sentir, manifestarás emociones negativas.

Así pues, procura que todos tus actos sean acordes con lo que de verdad sientes y no con los «debería» y los «tengo que». Nunca estás entre la espada y la pared; existe un campo de infinitas posibilidades al que puedes conectarte y encontrar una de las infinitas soluciones para cada circunstancia que se te presente.

Y si se te presenta una circunstancia en la que al parecer estás obligado a hacer algo que no deseas, no digas «no me queda otra». Eso no existe para el Universo. Al entrar con una frecuencia alta en el campo de las infinitas posibilidades, el electrón seleccionará dentro de dicho campo la mejor solución para ti.

Por lo tanto, tus actos deben estar en consonancia con el amor y los deseos de tu alma. Si empiezas a vivir de esta forma, tus limitaciones dejarán de existir. En cambio, si tu mente toma decisiones a través de la culpa y el miedo, jamás lograrás manifestar tu poder en beneficio propio. 

La liberación más grande consiste en tomar decisiones de acuerdo a lo que de verdad sientes, y no a lo que crees que deberías hacer. 

Cómo tomar decisiones sin culpa

 

Celebra cada circunstancia de tu vida

Celébrala, independientemente que te guste o no. Cada vez que haces algo con celebración, estás manifestando el amor que está en ti. Asimismo, cada vez que celebras la circunstancia que está sucediendo en tu vida, de inmediato la cambias. Por ejemplo, si vives con seres difíciles de sobrellevar, celébralo.

No existe un ser que sea enteramente malo y que no quiera manifestar el amor que es. Lo que ocurre es que está desconectado y no lo sabe. En realidad es un ser de luz, y puedes cambiarlo. Cuando cambias tu mirada hacia lo que estás viviendo o hacia ese ser, tanto la circunstancia como la persona cambian.

Cambia tu mirada y cambiarás tu mundo. Lo peor que puedes hacer es sostenerte en el pesar y la queja. En cambio, la solución está en celebrar esa circunstancia difícil y entonces modificarla al cambiar tu mirada hacia ella. Al asimilar esto, ya has realizado un cambio importante.

Observa toda circunstancia como favorable

Como resultado de tu cambio de mirada las situaciones en tu vida empezarán a modificarse. Por ejemplo, puedes cambiar a ese jefe insoportable. Si lo observas como una pesadilla, la sostendrás. Sin embargo, si lo celebras como el mejor jefe del mundo, cambiará, o se irá y vendrá entonces el mejor jefe del mundo.

Cada vez que celebras una circunstancia como favorable, esa circunstancia favorable vendrá a ti. Aprende incluso a mentirte a ti mismo. Puedes decir: «Este lugar es maravilloso. Todos los seres que me rodean son amables, considerados y me tratan muy bien. Estoy en un sitio donde abunda la paz».

Al afirmar eso observas en el campo de las infinitas posibilidades esas maravillas. De esta manera las atraes a tu vida y es imposible que no vengan a ti. Has realizado una mirada cuántica. Ahora bien, esto funciona exactamente igual en sentido inverso. Cada vez que te quejas y tienes una mirada carente, sostienes eso en tu vida.

El equilibrio entre dar y recibir

 

Al observar algo que no deseas, lo creas

Cada vez que te sostienes en una circunstancia que no te gusta, la creas y recreas. Cuando te quejas de tus hijos, tu marido, tu esposa, tus jefes o tus padres, estás sosteniendo una y otra vez esa observación en el campo de las infinitas posibilidades, y como consecuencia, justo eso llegará a tu vida.

Como te decía en el punto anterior, la solución está en celebrar tus circunstancias. De esta manera, las decisiones no las tomas tú, sino que vienen a ti cuando decretas que todo en tu mundo es perfección, que todos los seres a tu alrededor son maravillosos, y que vives en absoluta paz.

Al hacer esto comprobarás que la observación de lo que quieres hace que eso mismo sea lo que llegue a ti. Recuerda pedir el qué, y el cómo te lo trae el electrón; las soluciones son infinitas. Puede ocurrir que te cambies de trabajo, que cambien las personas a tu alrededor, o que se vayan y vengan otras.

Celebra lo que tienes y sostén lo que quieres

Todo es posible. Por esto insisto tanto en que debes celebrar tus circunstancias y enfocarte en saber lo que realmente deseas. Cada vez que sostienes tu mirada en la carencia, el electrón dice: «Ok, ¿de nuevo quieres eso? Pues te lo sigo dando, ya que veo que lo sigues sosteniendo».

Mantenerte en la inconformidad, la tristeza y la queja las crea una y otra vez. Ten en cuenta que esa circunstancia densa, donde estás rodeada o rodeado de gente tóxica, la has creado tú. Es tu creación, pero puedes cambiarla celebrando todas las situaciones de tu vida.

Así pues, no importan las circunstancias por las que atraviesas actualmente. Celebra lo que tienes y sostén tu mirada en lo que quieres. En el momento en que haces esto, tu vida empieza a cambiar. Así pues, tienes mucho trabajo por hacer, porque estoy segura de que en este momento muchas de tus circunstancias son muy pesadas.

Puede haber falta de dinero, de salud, o de relaciones armoniosas. Si has llegado a ese punto, comprendo que celebrar y mirarlo todo muy lindo implica un esfuerzo considerable. Por eso insisto en que incluso debes mentirte a ti mismo, o más bien, mentirle al electrón y contarle no lo que tienes, sino lo que deseas.

Crea en tu mente la circunstancia que deseas

Todo esto te lo digo por experiencia propia. Recuerdo que hace ya muchos años, para lograr salir de una circunstancia en donde estaba ahogada en carencia, empecé a crear una situación en mi mente y a sostenerla con mis palabras y mis pensamientos. Les hablaba a todas las personas de circunstancias que había creado en mi mente.

Las había creado para conseguir manifestar una oportunidad de trabajo, y las sostenía cada vez que venía alguien; lo sostuve y sostuve hasta que al cabo de seis meses ocurrió eso que había creado, exactamente igual a lo que yo venía contándoles a todas las personas.

Cambiaron los personajes, pero esa circunstancia que yo decía que me estaba sucediendo en tiempo presente se presentó tal cual después de seis meses. Estaba con el agua al cuello y ahogándome. Es más, no es que me estuviera ahogando: Ya estaba ahogada en ese momento.

Conviértete en observador de la abundancia

A pesar de la adversidad, manifestaba la perfección en mi mente hasta crear una circunstancia propicia. Cuando la gente preguntaba: «¿Cómo estás?», yo respondía: «¡Muy bien!». Así, contando lo que yo quería que sucediera, generé el cambio en mi vida. Me convertí en una observadora de abundancia.

Y convertí a otros en observadores a mi favor. Cada vez que tú cuentas que te va mal, que tu vida es un desastre y que estás ahogada, la gente te observa en las mismas circunstancias que tú cuentas. Esas circunstancias están siendo sostenidas no solo por ti, sino también por todos aquellos que se asocian contigo en tu mirada cuántica.

Entonces, ¿qué quieres que sostenga tu mirada cuántica? Es muy fácil crear una circunstancia en tu mente. En vez de quejarte, puedes decir: «La cosa está cambiando. Hay una oferta que se ha abierto y estoy segura que es para mí». En cambio, ¿qué vas a crear con decir: «Me va mal. Nadie me llama. No hay trabajo»?

Debes crear circunstancias en las cuales te va muy bien y todo cambia. De esta manera, empiezas a mover la energía. Empiezas a crear. Te aseguro que esto funciona en forma maravillosa. Yo tardé seis meses, pero estaba en la Era de Piscis. Ahora estamos en la Era de Acuario y no tienes la necesidad de tardarte tanto. 

Cambia tu realidad en cada momento del ahora

 

Respétate a ti mismo en todas tus decisiones

Esta es la muestra de amor más grande no solamente hacia ti, sino hacia todos los seres que contactas. El tomar decisiones producto del respeto hacia ti mismo es lo mejor que le puedes manifestar a todos los que te rodean. Recuerda que estás creando lo que llega a tu vida.

Hasta ahora, en este juego de la ilusión de la inconciencia nos han hecho creer que el miedo era amor. Hasta ahora, has tomado la gran mayoría de tus decisiones por culpa y miedo. Casi todas las decisiones que toma una persona común no tienen en cuenta el respeto a sí misma. Siempre pone por delante a otros.

Todos los condicionantes que pones como pretextos para no cambiar están motivados por el miedo. Si estás incómodo con una situación, persona o cosa, debes tomar una decisión urgente por respeto y por amor a ti mismo. En este tema también debemos efectuar un cambio de paradigma.

Lo más importante no es el respeto a los demás, sino el respeto a ti mismo. El respeto a ti mismo hace que tú respetes al otro y ames al otro, independientemente de que a ese otro no le gusten tus decisiones. Eso es manifestar el amor en ti y manifestarlo en todas las circunstancias y personas que contactas a diario.

Al aplicar lo que te he compartido atraerás situaciones, personas y cosas que van a durar mucho en tu vida, porque las estás cuidando.

Sé leal a ti mismo

Esto es algo que también requiere que le des vuelta a un concepto erróneo. Si deseas tomar decisiones acertadas, la lealtad debe enfocarse hacia ti mismo y no hacia los demás. Hasta ahora has decidido basándote en esa idea que nos han inoculado del miedo y la culpa como sinónimos de amor.

Al adoptar ese punto de vista pones al amor fuera de ti. El amor está dentro de ti. El amor es en lo que te conviertes e irradias. Si basas todas tus decisiones en el respeto y la lealtad a ti mismo estarás respetando y amando al otro. Las consecuencias de tomar decisiones desde el amor, la lealtad y el respeto a uno mismo son siempre perfección.

El tomar decisiones basadas en el otro provoca que debas soportar situaciones que a la larga te enferman, te destruyen económicamente, e incluso hacen daño a los seres que te rodean. En cambio, cuando logras el respeto y la lealtad a ti mismo, el amor en ti se manifiesta. Nunca tengas miedo de tomar decisiones basadas en el respeto propio.

En resumen, nunca tengas miedo. Siempre que aparece la lealtad y el respeto a tí mismo, el amor se manifiesta. No te fijes en las consecuencias, porque éstas siempre serán perfección si tus dercisiones y acciones están basadas en el amor y el respeto en los cuales te has convertido.

El amor manifestado hacia todas las cosas, circunstancias y seres que contactas a diario hacen que los cuides de verdad.

Respeta el libre albedrío de los demás

Este punto puede ser algo controvertido. Hemos hablado de amor, respeto y lealtad a uno mismo, pero hay algo más que debes aprender: Respeta el libre albedrío de las personas que contactas a diario. Debes hacerlo, porque el otro también tiene que manifestar el amor, el respeto y la lealtad a sí mismo.

Entonces, puede ser que estés muy contento respetándote y siéndote leal, pero son dos cosas muy distintas el tomar decisiones basándote en eso, y el no respetar ni serle leal a los demás. Tienes que respetar el libre albedrío del otro para que pueda también manifestar su propio amor, lealtad y respeto hacia sí mismo.

Y aquí es donde se complica la cosa. Tener ese respeto no resulta fácil si estás acostumbrado a conseguir tus objetivos basándote en lo que el otro tiene que hacer por ti, o esperando que ese otro haga lo que tú quieres. Para tener circunstancias de abundancia, amorosas y pacíficas debes respetar el libre albedrío de los demás.

Recapitulando lo visto hasta ahora, cuando empiezas a celebrar cada acontecimiento de tu vida empiezas a cambiarlo y a sostenerte en la mirada de lo que quieres. Empiezas a respetarte y a tenerte lealtad. Observas abundancia y ésta no tardará mucho en llegar a ti. Ahora también debes permitir que el otro haga lo mismo que tú.

No intentes manipular, exigir o condicionar al otro

Ya que estás obligado a respetar el libre albedrío del otro, deja de convencer, exigir, condicionar o manipular a las personas para lograr tus objetivos. Esto es algo a lo que debes estar muy atento y erradicarlo, porque es una conducta muy común y muy arraigada en nuestra sociedad.

Es algo que incluso nos enseñaron y fomentaron nuestros padres, pero que debemos corregir. Hemos copiado lo que hicieron ellos en la Era de Piscis. Tampoco intentes controlar la vida del otro. Evita todo esto y tus observaciones dentro del campo cuántico serán muy favorables, porque manifestarás amor en todas las cosas que contactes.

Pon tu atención solo en las cosas que deseas

Esto es lo único que te debe importar. Incluso si debes mentirle al electrón para no afectar tu observación al contaminarla con tus quejas, lamentos. Evita a toda costa establecer una mirada carente, reforzada y sostenida por los demás al observar también todas tus desgracias.

Todo eso distrae tu atención dentro del campo de las infinitas posibilidades, cuando lo que debes hacer es fijar dicha atención solamente en lo que deseas hacer, conseguir, tener y sanar. Una vez hecho esto, le dejas a la dinámica atómica, al genio de la lámpara, decidir cómo te trae tus deseos.

Si tienes dudas acerca de cómo debes hacerlo, imagínate pidiéndole al genio de Aladino lo que quieres, y dejándole a él la elección de la forma en que te lo dará. De esta manera, toda tu atención debe estar centrada en el qué quieres, y no en el cómo llega.

Pon atención también en sostener tu radiación de amor, que es la que debes manifestar en todas las circunstancias, cosas y seres con los que contactes, para así cuidarlos y permitirle al campo de las infinitas posibilidades traerte todo lo que deseas de la forma más perfecta para ti. Siempre confía en que sabrá hacerlo.

No olvides que eres un Dios vivo

Nunca olvides que no existe ser o cosa que pueda impedir que todos tus deseos se conviertan en realidad. De hecho, todos tus deseos ya se han convertido en realidad, porque todas las circunstancias que bloquean tu vida son tus propias miradas como observador en el campo cuántico.

Cada vez que te quejaste, lloraste o te enfadaste, marcaste con ello tu observación. Esos bloqueos fueron creados por ti mediante esa mirada carente. Debemos empezar todo de nuevo, pero es maravilloso venir aquí en esta Era de Acuario. Es maravilloso poder darle vuelta a todo para encontrar la verdad.

Y esa verdad es que el amor es la única realidad que existe en todo el Universo. Debes reconocerlo en ti y manifestarlo en todas las cosas, circunstancias y personas que contactes. En ese momento todos tus deseos y todo lo que amas durarán por siempre en tu vida, porque los cuidas como Dios cuida de su creación.


Si te gustó este artículo y quieres profundizar más en este tema, te recomiendo que leas el artículo anterior: El amor mueve montañas

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